Tomado de Los libros arden mal, de Manuel Rivas, del capítulo titulado "El arquitecto portugués".
Las mujeres en Cantabria eran las únicas que podían cargar a la cabeza porque, según me decía un anciano de Sopeña de Cabuérniga, tienen el cuello más fuerte que los hombres.
En Carmona a las mujeres a las que se les da bien llevar bultos a la cabeza, a las que tienen buen equilibro para llevar lo que sea a la cabeza (se puede llevar de todo), se les dice que "tienen tarmeñu".
Las mujeres en Cantabria eran las únicas que podían cargar a la cabeza porque, según me decía un anciano de Sopeña de Cabuérniga, tienen el cuello más fuerte que los hombres.
En Carmona a las mujeres a las que se les da bien llevar bultos a la cabeza, a las que tienen buen equilibro para llevar lo que sea a la cabeza (se puede llevar de todo), se les dice que "tienen tarmeñu".
"¿Por qué las mujeres llevaban, llevan, las cosas en la cabeza? Hay algo que está claro. Necesitaban las manos libres para llevar a las criaturas. Yo era uno de esos críos. (...) No era consciente de esa dura belleza que tenía ante los ojos. De esas composiciones de arte épico que eran las mujeres que llevaban cosas encima de la cabeza, sobre la corona de un paño." Manuel Rivas, en "Mujeres que llevan cosas encima de la cabeza", artículo publicado en "A cuerpo abierto" (Alfaguara, 2008).
ResponderEliminar"esfulciar: perder el equilibrio."
ResponderEliminarDe wickionario cántabru.