La casa a sur
como las flores
el dintel encalado
como la cuadra
vacía
y la vecina
agua y sangre
diciéndonos
eso es lo que somos
a la puerta
como las gallinas
todas las tengo negras
para diferenciarlas de las de la vecina
todas rojas
el ojo desorbitado
mirándonos
fuera
limpiando cunetas en Asturias
el otro hijo en Engalaterra
y el que no está
en la cama lo encontré.
Prefiero no decir.
Y yo me descubro
pensando:
Engalaterra,
como Cervantes.
Este fin de semana, el domingo me parece, El Diario Montañés publicó un manifiesto en contra del empleo de anglicismos y en contra del uso no sexista del español firmado por Tono (el del Archivo Lafuente), Salcines (el de siempre), Aura Tazón (la que empieza) y otros eruditos locales. Llevaba por título "Por una ecología del español". Lo leí en Cabuérniga.
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