En la antigua venta de Tajahierro.
La venta es de finales del s. XIX. No sé de cuándo el mural ni quién pueda ser el autor.
Es impresionante que transcurridos miles de años los motivos sigan siendo los mismos, impresiona la hondura que alcanzan las raíces de nuestra cultura, aquí.
Este mural junto con los del bar Chema de Torrelavega, obra de Padilla, y los del bar del difunto Jaime el de Lamiña, cuajados de vacas tudancas, son tres joyas que bien pudieran considerarse parte de una misma cosa, y protegerse.
1 comentario:
Es claramente un corzo. Macho además. Por lo demás es muy interesante el mural
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