Seguramente se explique por motivos geofísicos pero, por si acaso, no quiero dejar de señalar que en las coordenadas que se indican más abajo, sin topónimo que aparezca en los mapas, hay una pieza territorial, la de la foto, de lados regulares rodeada aparentemente por una zanja enorme.
X: 398.452,19
Y: 4.773.029,16
Y: 4.773.029,16
Las coordenadas conducen directamente a los restos de una construcción cuadrangular que se adivina en el centro.
El conjunto está al pie del camino que conducía a Castilla por Venta Vieja.
3 comentarios:
Vaguada, pernal (o toral), vaguada, pernal..., aquí la línea de cumbres gira y seguimos con la serie: vaguada, pernal, vaguada...
En ese giro el pernal está truncado. Es ese pernal cercenado la pieza territorial que señalo.
Pernal (más Cabuérniga) y toral (más el Nansa, aunque ambas palabras son montañesas por igual) creo que son las guiniyas (o guineas) pasiegas.
Los pernales, además de ser utilizados como vías de comunicación transversales, entre valles, son lugares donde se suelen encontrar brañas (y entre pasiegos cabañas, claro, porque muchas de estas proceden de brañas previas).
Digo que son lugares donde se suelen encontrar brañas y no lugares donde se establecen brañas porque tengo para mí que las brañas son pastos naturales domesticados, es decir, no se hacen sino que, dicho de alguna manera, se aprovechan, son lugares de los que nos beneficiamos, que hacemos nuestros.
Que las vacas saben ir solas a las brañas, a los midiajos y a los seles..., sí, claro, porque son los lugares naturales donde ir a pastar, sestear o pasar la noche. Nosotros no hemos hecho más, ni tampoco menos, que acoplarnos. Es este respeto nada inocente lo que subyace en nuestro paisaje, que es lo mismo que decir en nuestra cultura. Un valor en sí mismo que puede servir como inspiración para encontrar (o al menos buscar) soluciones a problemas contemporáneos: nuestro potencial más valioso..., que estamos despreciando.
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