lunes, 25 de agosto de 2014

Merderu Vs. Verdero, balcones madrileños cona Virgin La Paloma, lechiría montañesa en Madrid, la mejor escultura de Madrid sigún Umbral, auturritratu en difiríu, quín enjareta´l discursu, Béjar borrosu, canicillos en Béjar y miraorios cabuérnigos

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En Sopeña de Cabuérniga hay un regato, el Merderu, que era utilizado en tiempos como alcantarilla. En casi todos los pueblos había uno. En Sopeña cruza la Calleja Entresietos. Hoy los vecinos más finos lo llaman Verdero. De verde, dicen, por el verde de la mies vecina, que se llama Jerreru, muy probablemente por dedicarse al cultivo de forraje para los caballos (que eso y no otra cosa son las herrenes, herranes, etc. que tanto abundan en nuestra toponimia y que, por cierto, es de donde viene, probablemente, Reinosa).

La cartelería actual recoge el neotopónimo: Verdero. Yo me niego a dejar de llamarlo Merderu. No encuentro motivo para hacerlo. Es donde capábamos renacuajos. Se hacía en el Merderu, no en otro sitio. Enlazo aquí noticia de Enfocant relacionada.

La foto está tomada en Fresno del Río, junto a Reinosa:


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Fotos de la Virgen de la Paloma en Madrid, este verano. Relacionar con las fotos que puse aquí de la Virgen del Mar en el Barrio Pesquero de Santander, también tomadas este verano.

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Lechería en Madrid. Este tipo de establecimientos solían estar regentados por montañeses. Vid. la película La mitad del cielo, fantástica.

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Decía Umbral que esta escultura era la mejor de Madrid. Está a la entrada de la cafetería del Círculo de Bellas Artes.

Compré en Madrid Un ser de lejanías. Tuve oportunidad de que me lo firmara Umbral en La Casa del Libro. Pero me surgió algo y no pude ir. No recuerdo por qué no fuí, qué me surgió. Tengo el libro sin dedicar.

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Éste es el dedo de García-Alix señalando a un tipo que no soy yo. La foto la tomé durante un pase de su documental De donde no se vuelve, que recomiendo.

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Autorretato en diferido: Raquel y yo.

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Las fotos de esta foto se ven fatal, pero me sirven para contar algo que creo de interés, lo siguiente:


Las fotos son de una exposición montada por una fundación conservadora con sede en Madrid, no voy a decir cuál, para qué. Son de un fotógrafo catalán de los años veinte. Estas cuatro fotos forman una serie. La lectura de esta serie es: la hermana de una madre soltera queda embarazada y también ella se queda sola. Se trata de un determinismo social desolador. Es una lectura obvia si se colocan las fotos en su orden. Pero resulta que las fotos se han colocado en desorden, y cuesta entenderlas. Se ve que están muy bien hechas (era un fotógrafo con dejes pictorialistas), se aprecia que a nivel estético son muy potentes, pero nada más. El mensaje subversivo de la serie queda borroso. ¿A posta? Habría que preguntárselo al comisiario de la exposición, que o es muy torpe o muy adulador.

Está clara la importancia de quién produce discurso.

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Dos personitas en Béjar, Salamanca. Es una ciudad, o pueblo, a punto de desmoronarse. Se nota.

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También en Béjar, canecillos de estilo románico, ¡en madera!, en una antigua casa en ruinas.



Hay otra casa con el mismo elemento decorativo un poco más abajo. Quizá no tenga ninguna trascendencia, pero a mí me parece importante que haya canecillos ¿románicos? en arquitectura civil y además en madera.

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En la carretera de la Collá de Carmona, que cuando se hace del revés pasa a ser Collá de Valle, hay varios miradores donde han escrito con spray miraor. Pero la realidad supera siempre a la ficción: en la zona los miradores son denominados miraorios.

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