jueves, 27 de febrero de 2025

Todo así

Cantaba el miruellu todos los amaneceres en el alero de la casa de enfrente. Era una alegría. Anduvo la urraca una temporada husmeando. No la asustamos, no interferimos, la dejamos.

Ya no canta el miruellu en el alero de la casa de enfrente. Pronto no echaremos en falta su canto.

Todo así.

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