miércoles, 12 de diciembre de 2018

Contexto del mural del cargadero de Dícido

En la entrada anterior he puesto fotos de un mural que hay en un portal bilbaíno del cargadero de Dícido, en Mioño (Cantabria) [en realidad es el de Piquillo, en Ontón], mural donde todas las figuras parecen satisfechas y adoptan pose heroica.

Pongo a continuación foto de detalle de cuadro de la misma época expuesto en el Museo de Bellas Artes de Bilbao:



Figuras heroicas, pero difícilmente satisfechas.

Esta gente, la de este cuadro, es la que cuando se puso a escribir hizo que saltaran las bielas. Su literatura es valiosísima. Es hoy prácticamente desconocida e inencontrable, como todo lo suyo. Yo tiro por la literatura por cuestión personal, pero todas las facetas del primer movimiento obrero son igual de interesantes.

4 comentarios:

Serrón dijo...

El cargadero que se menciona no es el de Dícido, sino el de Piquillo, en Ontón, cercano al de Dícido.

Serrón dijo...

¿Hombres o mujeres?

Por la tarea, diría que mujeres.

Anónimo dijo...

Disculpad que me salga de tema pero no puedo evitar señalar la correspondencia entre Piquío (Santander) y este Piquillo.

Tiene que haber multiples en la toponimia menor de la costa desde Unquera a Ontón (quizás incluso más allá) pues parece un claro caso de "orotoponimo".

Serrón dijo...

Sí, seguro. Uno de los pequeños cabos que asoman a la bahía de San Sebastián, en Guipúzcoa, lo llaman "el pico del loro", aunque seguro que en la toponimia oficial aparece de otro modo. No es el mismo caso que el del Piquío santanderino o que el del Piquillo de Ontón, pero responden a un mismo resorte.

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