"La costumbre, en este concreto caso, obligaba a retirar a la novia, en vísperas como quien dice de su casamiento, de la casa donde se hallaba sirviendo. Y esta costumbre que observaban escrupulosamente hasta los mozos más desarrapados, no podía Gerardo de ninguna manera despreciarla. Era montañés y de Lodeña: y las costumbres de aquel terruño tenían hondas raíces en las mismas entretelas de su alma."
De Neluca (B. Hernández y Hno. Ribera, 1924), novela de Manuel G. Villegas, p. 19.
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