Están quitando esos cordones de cantos blancos hincados al borde de los parterres de Piquío.
Son uno de los elementos más característicos del parque. Aparecen ya en las fotos más antiguas. Todos recordamos haber guardado el equilibrio sobre ellos de pequeños. Generaciones y generaciones. Al menos tres.
Las fotos me las ha enviado MHM anoche.
3 comentarios:
Normal que los quiten. Esas piedras van a volver al cauce del Pas, para su restauración ecológica. Además, al andar por esos cantos, las suelas de los zapatos se desgastan más, contribuyendo a la emisión de microplásticos en la playa del Sardinero. No menos importante, así se hacen inclusivos los jardines a los perros patada y a los perro niño, pudiendo entrar a cagar sin quedar empanzados con las piedras.
A mí me dejaban caminar por encima porque decían que tenía los pies planos. Por encima de estas piedras y por la arena seca que conservaba la forma de las ondas. Por cierto, en Peña Sagra se conservan también estas mismas ondas pero de varios miles de años atrás. Parece que también huellas de dinosaurio.
Me dicen que están guardando los cantos pintados de blanco, seguramente que para reutilizarlos.
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