El Archivo Lafuente, Noceda, El Diario Montañés y ANABAD

ANABAD dice que no quiere meterse en política, que no entra en la conveniencia de que el Gobierno de Cantabria se gaste 10 millones de euros en un proyecto, al del Archivo Lafuente me refiero, que tiene todos los papeles emborronados.

Que no entra porque sería hacer política.

Pero que qué mal Noceda, que está en contra.

Noceda dice que el Archivo Lafuente no le parece una prioridad, máxime cuando no sabemos nada de él (es cierto que no se sabe cuántas tesis doctorales se han alimentado de sus fondos, por ejemplo, si es que hay alguna), y cuando hay tantas necesidades públicas clamorosas pendientes de ser resueltas. Se me ocurre, a bote pronto, poner en claro la Biblioteca Central de Cantabria y el Archivo Histórico Provincial, que están sin dirección o con dirección ausente, el archivo intermedio, que no existe, el MUPAC, despiezado, la biblioteca del Marítimo y del METCAN, la de Tudanca, las bibliotecas públicas desaparecidas de Cabuérniga, Los Tojos, Puentenansa, Polaciones, Lamasón, Peñarrubia y así hasta el infinito, el escalpelo que meten a la Municipal de Santander, los centros de interpretación infradotados, etc.

Noceda no está diciendo nada que esté fuera de la lógica pública. Está defendiendo lo de todos. No sé otros. O si otros también lo están haciendo, entonces no sé cómo.